Las Dos Tierras
Al Faraón Egipcio también se le denominaba Señor de las Dos Tierras. El arrogante mundo académico occidental declaró que las Dos Tierras eran el Alto y el Bajo Egipto. No existe ninguna referencia del Antiguo Egipto para confirmar su opinión, o incluso para definir algún tipo de frontera entre el Alto y el Bajo Egipto.
En todos los templos del Antiguo Egipto, encontrará numerosas representaciones simbólicas que se refieren a la Unificación de las Dos Tierras, donde se muestran dos divinidades uniendo una línea de brote abierto con otra línea de brote cerrado. Se refirieron a ellos erróneamente como el papiro y las plantas de loto. Ninguna planta es nativa de ninguna área específica de Egipto.
Al analizar más en detalle a Hapi, encontramos que parece ser una deidad unisex representada como una figura masculina con pecho femenino.
El término, Dos Tierras, es muy familiar para los egipcios Baladís, que se refieren a él en su vida cotidiana. Estos opinan firmemente que hay Dos Tierras, una en la que vivimos y otra donde viven nuestros gemelos idénticos (del sexo opuesto). Los dos están sujetos a las mismas experiencias desde que nacemos hasta que morimos. Usted y su gemelo “Siamés”, que “según parece” fueron separados en el nacimiento, volverán a reunirse en el momento de la muerte.
Los empadronadores de los egipcios Baladís describen, en sus lamentaciones después de la muerte de la persona, cómo al difunto se le prepara para unirse con su contraparte (del sexo opuesto), COMO SI fuera una boda. Esto recuerda a muchas ilustraciones simbólicas del Antiguo Egipto atando el nudo de las Dos Tierras. Estar casado es atar el nudo.[Más sobre este concepto se encuentra en Cosmología Egipcia : El Universo Animado , Tercera Edición por Moustafa Gadalla.]
En el lenguaje egipcio común, la palabra, Qarin, significa cónyuge.
Ya en los Textos de Unas (llamados de las “Pirámides”), encontramos que el Faraón Unas (2356–2323 AEC) se unió/junto a Isis inmediatamente después de su partida del reino terrenal. Esto se basa en la promesa de que desde que cada hombre es Osiris en su forma “muerta”, cada uno se une con su contraparte (Isis en el caso de un hombre), en el momento de la partida terrenal.
[Un extracto de La Cultura Revelada Del Antiguo Egipto, Segunda edicion por Moustafa Gadalla]
https://egyptianwisdomcenter.org/product/la-cultura-revelada-del-antiguo-egipto/
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