Las Fiestas de la Renovación Cíclica

Las Fiestas de la Renovación Cíclica

 

El tema principal de los textos del Antiguo Egipto es la naturaleza cíclica del universo y la necesidad constante de renovación de dichos ciclos a través de festivales bien designados.

Los egipcios veían estos festivales como parte de la existencia humana, que constituye el ritmo de la vida de la comunidad y del individuo. Este ritmo resulta del orden de la vida cósmica.

La renovación y el rejuvenecimiento de la vida del cosmos, de la comunidad y del individuo se ven afectados por los ritos. Estos ritos tenían/tienen el poder de provocar el rejuvenecimiento y el renacimiento de la vida divina. No celebrar los festivales en las fechas y horarios adecuados podría muy bien producir sentimientos de culpabilidad individuales o colectivos. Como tales, los festivales egipcios pasaron a tener la función de representar renovaciones cosmológicas (religiosas).

La mayoría de los egipcios no sólo esperan una bendición después de su participación, sino que también temen que les sobrevenga alguna desgracia si descuidan este acto.

El objetivo de los festivales egipcios era (y sigue siendo) el rejuvenecimiento y la renovación de las energías cósmicas. Durante los numerosos festivales religiosos del Antiguo Egipto, los participantes recurren a la verdad arquetípica de su conciencia cósmica (como es arriba es abajo, y como es abajo es arriba). Cada fiesta santa actualiza el ciclo sagrado arquetípico. Estos ciclos sagrados se han convertido en parte del calendario. Más exactamente, el calendario servía para indicar cuándo se manifestaban los poderes cosmológicos (neteru/dioses) y sus ciclos de renovación. Todos los primeros escritores griegos y romanos afirmaron estas correlaciones cósmicas del Antiguo Egipto, como Plutarco, en su Moralia vol. V (377,65):

… Ellos [los egipcios] asocian conceptos teológicos
con los cambios estacionales en la atmósfera circundante,
o con el crecimiento de los cultivos y las épocas de siembra y arado.

Todos los elementos y reglas que regían los festivales del Antiguo Egipto son exactamente aplicables a los festivales actuales con esquemas organizados y detallados. Los egipcios baladi continúan considerando los festivales y sus rituales como el clímax de sus prácticas religiosas, que son muy críticas para el orden y la armonía del cosmos y, por extensión, el bienestar de todos.

Todos los festivales actuales (excepto los de Mahoma y los de su familia inmediata) son una continuación de los festivales del Antiguo Egipto, camuflados bajo nombres islámicos.

El número oficial anual de festivales (mouleds) en el Egipto actual, aunque son contrarios al Islam, se estima en más de 3.000. No hay un solo día en Egipto sin un molde en alguna parte, y la participación es muy profunda. Al gran Mouled de Otoño de ElBadawi asisten más de dos millones de personas y a cada uno de los otros dos Mouled asisten, respectivamente, más de un millón de visitantes.

Todo esto es indicativo de la adhesión de millones de egipcios baladíes a sus antiguas tradiciones.